La segunda caja negra del A320 fue hallada este jueves en el lugar del impacto y trasladada por la noche a la sede en París del BEA, encargada también de examinar la primera, que registró las conversaciones en cabina.
Continúa el análisis de la caja
El organismo informó de que el examen de esta caja se inició desde su llegada al centro, y avanzó que los expertos prosiguen su análisis para establecer el "desarrollo factual preciso" de ese vuelo entre Barcelona (España) y Düsseldorf (Alemania), que se estrelló el 24 de marzo con 150 personas a bordo.
Este segundo dispositivo, que técnicamente se denomina Flight Data Recorder (FDR), registra los parámetros técnicos durante las últimas 25 horas de trayecto, tales como la velocidad, la altitud y el modo de pilotaje.
La caja, ennegrecida por el fuego, fue encontrada por una integrante del Pelotón de Alta montaña de la Gendarmería Nacional en una zona ya explorada con anterioridad, y estaba, según la Fiscalía de Marsella, "totalmente enterrada", lo que hasta ahora había dificultado su hallazgo.
Para el fiscal Brice Robin, encargado del caso, aporta un complemento "indispensable" para esclarecer los hechos y completar la información contenida en la primera caja, en la que ya se había perfilado una acción voluntaria del copiloto, el alemán Andreas Lubitz, de 27 años.