"Parece que el Hospital Sant Joan de Déu confirma que sufrió un brote psicótico", ha dicho Rigau, que ha indicado que el menor no veía a los agredidos y actuó imbuido por un arrebato inexplicable.
Más relación entre pediatras, escuelas y familias
Ha indicado que la salud mental es muy importante y básica, por lo que ha calificado de "imprescindible" aumentar la relación entre pediatras, escuelas y familias, y ha defendido la presentación de un informe del pediatra a la escuela antes de su ingreso en el centro.
"Se ha detectado un aumento de medicación desde edades pequeñas y nos parece que a veces determinados problemas de sueño, tranquilidad y relajación en lugar de hacerlo de formas tradicionales se resuelven con una medicación", ha alertado la titular de Enseñanza.
Ha reiterado que las escuelas catalanas son seguras y cuentan con un bajo nivel de conflictividad, y ha lamentado que el profesor sustituto asesinado había manifestado dos días después de entrar en el centro --hacía una semana-- que estaba muy contento con el clima y el orden del mismo.
Pasa la noche en el Hospital Infantil de Sant Joan de Déu
En cuanto al presunto agresor, el menor ha pasado la noche en el departamento de Salud Mental del Hospital Infantil de Sant Joan de Déu de Barcelona. Desde el hospital no se ha querido decir nada sobre cómo ha pasado esta primera noche, ni sobre cuándo será sometido a un reconocimiento psiquiátrico para establecer qué pudo pasar para que irrumpiera armado en el centro educativo y matara a un profesor y causara heridas a otras cuatro personas.
En torno al caso hay un hermetismo institucional total porque el alumno, que este lunes logró ser reducido por otro docente del instituto después del ataque, es un menor de 13 años y se está protegiendo al máximo su privacidad, como es preceptivo en estos casos.
Por su parte, fuentes de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia de la Generalitat (DGAIA) han asegurado que no se dará ninguna información, más allá de lo que este lunes comunicó a los medios sobre este caso la directora general, Mercè Santmartí.
Santmartí se limitó a explicar el protocolo al que se someten en estos casos los menores de 14 años que, por ley, "son inimputables", por lo que no pueden ser detenidos ni juzgados.
El protocolo consiste en hacer un seguimiento al menor con el trabajo de profesionales educativos y psicólogos que puede durar "tanto tres sesiones como diez", y siempre con una segunda valoración antes de dar por acabado el tratamiento
Respecto a si la DGAI quitará la custodia a los padres, desde este organismo se ha recordado que en general, ante un hecho similar, si las capacidades parentales de la familia son correctas, no se quita la custodia a los padres, y que sólo se hace si se detecta que hay un riesgo en el seno de la familia.