En el momento que los estafadores contactaban con el cliente, estos le ofrecían ganar unos ingresos extra mediante la inserción de anuncios de su empresa en internet. De esta manera, la empresa estafada se daría a conocer de una forma eficaz, lo que le supondría al empresario obtener beneficios en un breve periodo de tiempo.
Una vez transcurrido el plazo para alcanzar la rentabilidad de la inversión, los estafadores pagaban a sus clientes con una moneda virtual inventada que carecía de valor monetario. De tal manera que, las empresas inversoras perdían todo su capital invertido sin posiblidad de recuperarlo.
"Los estafadores pagaban a sus clientes con una moneda virtual inventada que carecía de valor monetario"
'Ingresos' express
El objetivo de la organización criminal era atraer a personas que buscaban algún tipo de ingreso económico en el menor tiempo posible.
Estos ingresos ficticios surgían de la compra de los packs publicitarios que los estafadores ofrecían a sus clientes, garantizándoles una rápida rentabilidad de su inversión mediante la introdución de publicidad de la compañía en internet.
Los packs se ofrecían como productos con una alta rentabilidad, por ejemplo: si la empresa anunciante hacía una inversión de 16.000 euros podría conseguir unos beneficios anuales de 61.000 euros.
Grandes cantidades de dinero en cinco divisas diferentes
La Policía Nacional ha intervenido significativas cantidades de dinero en diferentes divisas: 22 millones de dólares americanos, cinco millones de euros en una cuenta bancaria en Letonia, alrededor de 15.500 euros en efectivo, 2.600 dólares canadienses, 1.600 libras y 365 dólares australianos.
Además, se han incautado 18 equipos informáticos y dos vehículos de alta gama. La Policía no descarta que el resto del dinero estafado se encuentre en paraísos fiscales.