El hecho delictivo tuvo lugar en "una vivienda habitada donde el arrestado accedió aprovechando que la propietaria había cambiado de domicilio recientemente".
Entre los efectos sustraídos, "se apropió de un motocultor, una lavadora, dos relojes, una estufa, tres cadenas de oro, dos anillos de oro, varios pendientes de oro y 43.200 euros en efectivo".
El ahora detenido vendió parte de las alhajas sustraídas en un establecimiento compra de oro.