El desalojo, producido a las 21.00 horas de ayer, responde a una "medida cautelar" que incluye el perimetraje del edificio y se toma como acción prioritaria en la que se ha primado la seguridad de los residentes, explica la corporación municipal.
Tras el desalojo, la mayoría de los residentes disponen de alojamiento alternativo en hogares de familiares.
El Ayuntamiento de Arona busca una opción de alojamiento temporal para aquellos residentes que no disponen de alternativa.
Los servicios municipales del área de Urbanismo de Arona realizarán hoy una inspección completa de la estructura del edificio.