Al llegar al lugar los agentes observaron al arrestado y a la joven abrazados, y cuando intentaron entrevistarse con ellos continuaron en esa actitud sin atender a las indicaciones de los policías. Al comprobar la filiación del detenido se verificó la orden judicial de alejamiento de la menor dictada desde los juzgados de violencia de la mujer, así como la imposibilidad de comunicarse con ella, decisión vigente desde el pasado 10 de marzo.
A la vista de la situación se procedió a la detención de P.R.C.R., momento en el que la menor trató de impedir el arresto, una agente trató de calmarla y la chica arremetió contra esta policía provocándole lesiones en un dedo. De hecho, el estado de alteración de la menor hizo que los policías tuvieran que reducirla, ya que comenzó a autolesionarse cuando se trasladaba al arrestado a las dependencias policiales. De todo ello se informó a la autoridad judicial competente.