Junto al trabajo de los agentes de la unidad operativa sobresale la colaboración ciudadana en el esclarecimiento de este acto vandálico, detectado el pasado 14 de abril. Incluso, en la investigación se verificaron las referencias sobre los hechos a través de las redes sociales que manejaban los jóvenes. En el servicio también se ha actuado coordinadamente con la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional.
Con toda la información recabada, se localizó a los progenitores de los chicos, se entablaron conversaciones informativas con representantes del centro escolar y se informó de todo ello a la Fiscalía de Menores para proceder de manera adecuada en este caso. Debido a todo ello, los jóvenes acabaron confesando los hechos y ahora prosiguen los trámites judiciales para determinar las responsabilidades legales e incluso pecuniarias por la comisión de dicho acto vandálico. Además, desde la Fiscalía de Menores se ha abierto un expediente para realizar un seguimiento a los chicos.
La primera teniente de alcalde y concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Zaida González, ha felicitado a los agentes "por la diligencia, profesionalidad y rapidez con la que han actuado en este caso. Los ciudadanos deben saber que este tipo de actos vandálicos, que tanto nos molestan, no quedan impunes". González extendió su agradecimiento "tanto a los ciudadanos que han colaborado en este caso como a la propia Fiscalía de Menores, que nos ha guiado en la resolución adecuada de esta investigación", concluyó.
Fueron los agentes que realizan las labores de vigilancia adecuadas en el parque García Sanabria los que, el pasado 14 de abril, observaron la estatua dañada e incluso localizaron la cabeza de la misma tirada en una fuente cercana del mismo parque. Aunque este elemento pudo luego ser recolocado por una empresa especializada, la cabeza permaneció depositada en el servicio de Logística de la Policía Local hasta su reimplantación.