Este servicio se enmarca en las labores que realiza la Unipol habitualmente para tratar de erradicar el menudeo de drogas en diversas zonas del municipio.
Los agentes montaron un dispositivo de vigilancia en los alrededores de la calle Dácil Vilar Borges y llegaron a presenciar una transacción de drogas entre el primero de los detenidos, D.J.R. y un comprador.
A raíz de esta circunstancia se intervino deteniendo al vendedor y levantando un acta sancionadora a la otra persona.
Tras realizarse un cacheo preventivo al arrestado, y gracias al apoyo prestado por la subunidad canina de la Unipol, se detectaron 31 gramos de hachís que tenía escondidos bajo su ropa interior.
En ese momento, otro varón que se encontraba por los alrededores al observar la presencia policial huyó a la carrera del lugar, tirando al suelo unas diez bolsitas con diversas cantidades de heroína también preparadas para su venta. Un agente lo persiguió y dio alcance poco después, procediendo a su detención.
En el momento del arresto ambos vendedores también tenían pequeñas cantidades de dinero en su poder. Además, se realizó una inspección ocular y revisión por parte de la subunidad canina del interior de un vehículo propiedad de los detenidos por si se detectaban más sustancias estupefacientes.
Ambos fueron trasladados a dependencias policiales quedando a disposición de la autoridad judicial pertinente.