Dicha investigación comenzó a primeros del mes de julio y finalizó en el mes de noviembre del año en curso, dando como resultado la detención de tres personas y la investigación de otras dos, recuperando la cantidad de 1.111 kilogramos de cableado de cobre.
Labores policiales de prevención
Los agentes pertenecientes al Equipo Roca de la Comandancia de Las Palmas, dentro de sus funciones de la orden relativa al control de material de cobre, realizaron a mitad de año varias inspecciones de ventas de dicho material realizadas en las distintas recuperadoras de Gran Canaria, identificando tres ventas aparentemente irregulares de diferente tipo de material realizadas por dos personas.
Primeros investigados en Cádiz y material de Tenerife
Tras las indagaciones policiales correspondientes la Guardia Civil encontró indicios suficientes del uso de autorizaciones manipuladas de venta por parte de una persona de iniciales P.G.L., vecino de la provincia de Cádiz -de 53 años de edad y sin antecedentes policiales- donde autorizaba a un familiar suyo, siendo este F.G.L.M. -de 33 años de edad también vecino de la citada provincia- y a un conocido y vecino del municipio de Telde – de iniciales J.F.R.P.- para que se utilizaran sus datos para la venta del material.
Para proceder a la investigación de P.G.L y de F.G.L.M. el Equipo Roca solicitó la colaboración de la Comandancia de Cádiz, ya que ambos residen en dicha provincia.
Con las pesquisas policiales se corrobora que dicho material de cableado de cobre proviene de subestaciones de la isla de Tenerife, las cuales están siendo reformadas y que la persona que entregaba el material es trabajador de una empresa de instalaciones eléctricas, quedándose de esta manera con el dinero procedente de dichas ventas a partir de documentos manipulados, incurriendo por ello en un delito de falsedad documental.
Detención de dos personas relacionadas con la gestión de residuos
Durante la investigación el Equipo Roca relacionó con la trama por la venta de los 1.111 Kilogramos de material de cobre a dos trabajadores de una empresa de reciclajes de la isla de Gran Canaria, concretamente el gerente y un empleado, residentes en el municipio de Las Palmas de Gran Canaria y sin antecedentes policiales, ya que estos presuntamente rellenaron unos albaranes sin que los interesados se encontraran presentes para que P.G.L. cobrase supuestamente por la venta del cobre.