En esta ocasión, el fuego tuvo que ser extinguido por los bomberos y obligó a evacuar al alumnado y al profesorado de las aulas modulares, unos espacios que se habilitaron en su momento en la antigua facultad y que, tras su cierre, fueron cedidos a la escuela. Desde entonces se han utilizado para impartir docencia en el centro.
El sindicato con más representación en la escuela pública de las Islas advierte de los evidentes riesgos que estas actuaciones suponen para la integridad física del alumnado y del profesorado y reclama a la Administración Educativa que garantice la seguridad de toda la comunidad educativa. El equipo directivo del centro ha denunciado varias veces, sin éxito, esta situación a la Consejería de Educación a través de Inspección Educativa y de la Dirección Territorial.
En la actualidad, más de 800 alumnos estudian en la escuela y alrededor de 100 docentes imparten docencia en el centro.