Las sirenas han sonado varias veces en Kiev durante la noche y la mañana, según el enviado especial de TVE, Víctor García Guerrero, aunque después no se han producido bombardeos, al menos en el centro. La ciudad ha amanecido además nevada.
El gobierno ucraniano cifra en 352 muertos y más de un millar de heridos las víctimas de la invasión. Más de 660.000 personas han huido de la guerra, la mayoría en dirección a Polonia.
Fuertes bombardeos en Járkov
Los avances rusos se concentran en dos objetivos estratégicos: capturar la capital (y con ella, al gobierno) y enlazar territorialmente los territorios prorrusos de Lugansk y Donetsk (la región del Donbás, al este de Ucrania y fronterizo con Rusia) con la península de Crimea, que Rusia anexionó unilateralmente en 2014.
La ciudad de Járkov (1,5 millones de habitantes) está situada al noreste de Kiev y cerca de la frontera rusa, y desde el primer día de la invasión ha sufrido intensos ataques. Los rusos necesitan conquistar Járkov para poder avanzar por el este hacia Kiev sin dejar un peligroso núcleo de resistencia a su espalda.
El lunes, la ciudad vivió su jornada más trágica, con 11 víctimas en el bombardeo de un edificio de viviendas. Este martes, uno de los edificios bombardeados ha sido el de la asamblea regional, que ha sufrido el impacto de un proyectil de artillería.
A 100 kilómetros de Járkov, en Okhtyrka, en la región de Sumy (noreste), más de 70 militares y civiles ucranianos han muerto en los bombardeos con lanzaderas múltiples Grad, según el jefe de la Administración Militar Regional de Sumy, Dmytro Zhyvytskyi. La ciudad de Lebedyn, en la misma región, también está sitiada.
En la región de Kiev, un proyectil ha alcanzado un hospital privado de maternidad, según el consejero delegado del centro, Adonis, Vitaly Girin, citado por la agencia Ukrinform. Todas las personas han podido ser evacuadas.
"Para el enemigo, Kiev es el objetivo clave", ha dicho el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en uno de sus vídeos difundidos en redes sociales. "No les hemos dejado romper la defensa de la capital, y nos han enviado saboteadores... También los neutralizaremos", ha añadido.
Ataque a Jersón
Frente a Crimea se encuentran el oblast (región) y la ciudad de Jersón (300.000 habitantes) cuyo asalto comenzó en la noche del lunes, según el Servicio Estatal para Comunicaciones y Protección de la Información. "El asalto a Jersón ha comenzado. Según testigos, el enemigo avanza desde el aeropuerto a la carretera de Nikoláev y el anillo cerca de la planta de refrigeración", señala. Previamente, la Administración Regional había informado de una concentración de soldados rusos cerca del distrito de Shumen.
Remontando el cauce del río Dníeper se encuentran Zaporiyia (atacada el lunes) y Dnipro, localizada con varios puentes sobre el río, y por tanto otro punto de importancia estratégica. El enviado de TVE, Óscar Mijallo, ha informado de que las sirenas han comenzado a sonar en Dnipro, pero aún no se habían producido bombardeos.
Más al este, Mariúpol, en la región de Donetsk y a orillas del Mar de Azov, sigue bajo control del Ejército ucraniano, pero como resultado del ataque aéreo ruso ha quedado prácticamente sin suministro eléctrico.
Rusia ha reconocido bajas, pero no las ha cifrado, mientras el Ejército ucraniano asegura que ha dado muerte a 5.710 soldados rusos y ha inutilizado 29 aviones y 198 tanques. Ninguna de estas informaciones ha podido ser verificada por fuentes independientes.
La embajadora ucraniana en Washington, Oksana Markarova, ha asegurado este martes que Rusia ha utilizado bombas termobáricas. También conocidas como bombas de vacío, este tipo de armas provocan explosiones de alta temperatura, son capaces de vaporizar cuerpos humanos y están prohibidas por la convención de Ginebra.
Las negociaciones iniciadas el lunes entre representantes de ambos países acabaron sin resultado, aunque ambas partes acordaron volver a reunirse esta semana.
La mayor parte de la comunidad internacional continúa mostrando su rechazo a la guerra. La UE y Estados Unidos han acordado enviar armas y las sanciones internacionales están haciendo mella en la economía rusa, pero el presidente ruso, Vladímir Putin, está recurriendo a sus reservas de oro y divisas e incluso podría usar criptomonedas para eludir las restricciones.
La invasión rusa sigue su avance en Ucrania. Este martes han sonado de nuevo las alarmas antiaéreas en Kiev y las imágenes de satélites muestran un enorme convoy militar ruso que se extiende más de 60 kilómetros al noroeste de la capital.
El convoy "se extiende desde las afueras del aeropuerto de Antonov [a unos 25 km del centro de Kiev], en el sur, hasta las afueras de Prybirsk, en el norte", ha indicado el lunes por la noche la empresa estadounidense Maxar.
Las fotografías reflejan docenas de vehículos alineados uno detrás de otro en las carreteras de la campiña ucraniana, a veces con humo cerca o rastros de incendios de edificios.
Desde el inicio de la ofensiva rusa, las fuerzas ucranianas han defendido hasta ahora con éxito el acceso al centro de Kiev.
Nuevos despliegues de tropas en Bielorrusia
Asimismo, Maxar ha observado nuevos despliegues de tropas -helicópteros de ataque y vehículos terrestres- en Bielorrusia, a menos de 30 kilómetros de la frontera con Ucrania.
Los bombardeos han continuado también esta madrugada en todo el país y se han podido escuchar en el aeropuerto de Jersón, al sur de Ucrania.
El Ministerio de Defensa de Ucrania asegura que Rusia ha lanzado 113 misiles de tipo Iskander y Kalibr sobre ciudades, pueblos y aldeas de Ucrania. "Este sangriento crimen del régimen de Putin es una flagrante violación del Derecho Internacional Humanitario y exige una investigación del Tribunal de La Haya", ha denunciado la institución en Facebook.
Ucrania denuncia el uso de bombas termobáricas
La embajadora ucraniana en Washington, Oksana Markarova, ha asegurado este martes que Rusia ha utilizado bombas termobáricas. También conocidas como bombas de vacío, este tipo de armas provocan explosiones de alta temperatura, son capaces de vaporizar cuerpos humanos y están prohibidas por la convención de Ginebra.
La cadena estadounidense CNN ha informado de que uno de sus equipos había visto un lanzacohetes múltiple termobárico ruso cerca de la frontera ucraniana.
Rusia no tiene en cuenta "el derecho internacional humanitario"
Esta madrugada, el Ministerio de Defensa de Ucrania ha denunciado que las fuerzas de ocupación rusas están empleando tácticas para destruir la infraestructura sin tener en cuenta el derecho internacional humanitario.
"A pesar de que el enemigo está perdiendo potencial ofensivo, continúa disparando contra objetivos militares y civiles", ha declarado.
Según el Ministerio, Rusia usa para ello el espacio aéreo de Bielorrusia, país del que "planea incorporar las unidades militares más entrenadas" porque "su propio potencial ofensivo está casi agotado"-
Hasta el momento y de acuerdo a la información proporcionada por Ucrania, el Ejército ruso no ha tenido "éxito en ninguna de las áreas" del país.