Mientras, desde Moscú han amenazado con cortar el suministro de gas natural a Europa. El viceprimer ministro Alexander Novak asegura que tiene todo el derecho a tomar medidas si se imponen sanciones a sus exportaciones energéticas, como establecer un embargo al gas que llega a Europa a través del gasoducto Nord Stream 1.
Se recrudece la ofensiva también en los frentes de Mariúpol, en el sur, y Járkov, en el noreste, las principales zonas de combate en Ucrania. En Jersón las tropas ucranianas intentan reconquistar el poder de la ciudad y en Odesa las fuerzas rusas intentan hacerse con la única vía libre que aún conserva Ucrania para salir al Mar Negro. En Yitomir un bombardeo a edificios civiles ha matado a 10 personas y en Sumy han perdido la vida otras 21, entre ellas dos niños, según los servicios de seguridad ucranianos.
No obstante, las conversaciones para habilitar corredores humanitarios comienzan a dar sus frutos. Los civiles han comenzado a abandonar Sumy e Irpin. Rusia ha asegurado que permitirá también evacuaciones en Kiev, Járkov, Chernihov y Mariúpol.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski ha vuelto a subir un vídeo en redes sociales caminando por su despacho. Lo ha hecho para asegurar que no ha huido de la capital y que no tiene intención de hacerlo porque, dice, no le teme a nadie.
Por su parte, la inteligencia militar de Ucrania ha asegurado este martes que las fuerzas ucranianas han matado a un general ruso cerca de Járkov. El general Vitaly Gerasimov sería el segundo comandante ruso que muere en la invasión, pero esta información no ha podido ser verificada.
El Ejército ucraniano asegura que ha conseguido frenar los avances rusos, pero esta información no ha podido ser confirmada.