Kuleba ha asegurado que había acudido al encuentro con la intención de alcanzar un alto el fuego de 24 horas para aliviar la situación humanitaria, especialmente en Mariúpol, donde este miércoles fue bombardeado un hospital. "No hemos hecho progreso en esto", se ha lamentado en la rueda de prensa posterior.
Según Kuleba, su homólogo ruso tiene una "impresión distinta" sobre lo que ambos ministros pueden negociar. No obstante, Kuleba se ha mostrado dispuesto a "proseguir nuestros esfuerzos para buscar una solución a la tragedia humanitaria sobre el terreno".
"Creo que cuando dos ministros de Exteriores se encuentran, tienen un mandato de negociar, por habérseles sido confiado por sus dirigentes, su Parlamento, y estoy dispuesto a avanzar en esto para poner fin al sufrimiento de civiles y permitir salirles de las zonas ocupadas por las fuerzas rusas", ha declarado Kuleba.
El ministro ucraniano ha insistido en que su país no va a "rendirse" pero está abierto a buscar "soluciones diplomáticas equilibradas".
Rusia espera una respuesta en las negociaciones en Bielorrusia
"Hemos trasladado a la parte ucraniana exactamente qué queremos obtener, y han dicho que lo estudiarán y nos darán la respuesta en Bielorrusia", ha declarado Lavrov, en referencia a las conversaciones que han tenido lugar en Gomel. "La conversación de hoy ha confirmado que esta vía no tiene alternativa", ha explicado.
El ministro ruso ha acusado a los ucranianos de utilizar a la población civil "como rehenes". "Nosotros intentamos abrir los corredores humanitarios todos los días", ha afirmado. Y ha insistido en la versión oficial rusa de que el hospital atacado en Mariúpol no era ya un centro médico, sino una base de los nacionalistas ucranianos donde no había pacientes en el momento del ataque.
Lavrov también ha advertido que proporcionar armas a Ucrania o permitir la llegada de combatientes internacionales es "peligroso".
El anfitrión de la reunión, el responsable de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, ha mantenido a primera hora de una reunión previa con ambas delegaciones por separado.
Exigencias mutuas
Moscú exige que Ucrania se comprometa a la neutralidad, renuncie a entrar en la OTAN, reconozca la anexión de Ucrania y la independencia de los territorios del Donbás (Lugansk y Donetsk).
Por su parte, el gobierno ucraniano pide un alto el fuego y la retirada de tropas rusas, y se abre a negociar un estatuto de neutralidad para el país.
La reunión de Antalya se ha producido después de que miles de civiles hayan podido abandonar varias ciudades ucranianas a través de corredores humanitarios, pero los bombardeos continúan. Este miércoles, el bombardeo de un hospital en Mariúpol ha provocado la condena internacional.
Los combates continúan este jueves, decimoquinto día de la guerra, aunque Ucrania asegura que se van a abrir siete corredores humanitarios.
Más de 2.000 civiles han muerto, según las autoridades ucranianas, y la ONU cifra en más de 2 millones los refugiados que han huido del conflicto.
Ucrania asegura que tres personas, entre ellas una niña, murieron en el ataque al hospital de Mariúpol
Los combates continúan en la ciudad de Mariúpol, en la costa del Mar de Azov (sur), en el decimoquinto día de la guerra en Ucrania. El bombardeo de un hospital maternal en esta ciudad, el jueves, ha dejado al menos tres personas muertas, entre ellas una niña, según las autoridades locales.
Rusia niega haber bombardeado el hospital. Asegura que el edificio ya no funcionaba como centro médico y acusa a Ucrania de fabricar la noticia. "Es terrorismo informativo", ha asegurado la portavoz del Ministerio de Exteriores, Maria Zajarova. No obstante, Rusia ha ordenado a su Ejército que investigue lo sucedido.
El Alcalde de Mariupol, Vadym Boychenko, ha cifrado en 1.207 los civiles muertos en su ciudad durante los nueve días que llevan asediados por tropas Rusia. Boychenko ha advertido de que no disponen de calefacción, agua ni electricidad, y que los ciudadanos están agotando alimentos y medicinas. Además, ha asegurado que otro edificio residencial ha sido alcanzado este jueves.
De acuerdo con la agencia rusa Ifax, que cita fuentes del Ministerio de Defensa, tropas rusas han tomado partes de la ciudad. Las mismas fuentes aseguran que Rusia ha destruido 2.911 objetivos de infraestructura militar ucraniana.
Esta información no ha podido ser corroborada por fuentes independientes.
Más de 2.000 civiles han muerto, según las autoridades ucranianas, y la ONU cifra en más de 2 millones los refugiados que han huido del conflicto.
Nuevos corredores humanitarios y evacuaciones en Sumy
La viceprimera ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, ha asegurado que se van a abrir siete corredores humanitarios este jueves para evacuar a los civiles de las ciudades bajo asedio, pero la parte rusa no ha confirmado si va a permitir esas salidas.
Los civiles si han comenzado a evacuar, por tercer día consecutivo, la ciudad de Sumy (noreste), según el gobernador regional, Dmytro Zhyvytskyy. También se están evacuando las localidades cercanas de Krasnopillya y Trostyanets.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha asegurado a primera hora de este jueves que casi 35.000 personas han sido rescatadas a través de los corredores y ha subrayado que las autoridades están preparando seis nuevas vías para facilitar la salida segura de la población.
Según Zelenski, además de en Sumy se ha organizado la salida "desde las ciudades y pueblos de la región de Kiev y desde Energodar", ha dicho en un mensaje a la nación.
Este jueves se producen las primeras conversaciones de alto nivel entre ambos países desde el comienzo de la invasión. Los ministros de Exteriores, Serguéi Lavrov y Dmytro Kuleba, se reúnen en Antalya (Turquía) con la medicación turca.