Ya con el partido más escorado hacia la meta canaria, y después de un remate de Vicente Gómez a centro de Jonathan Viera, llegó el penalti de David García. Al que le dio en la mano, ya dentro del área, un disparo de Susaeta desde la frontal.
Aduriz batió a Javi Varas de fuerte disparo al palo derecho del meta sevillano, que adivinó la dirección del lanzamiento pero no llegó a tiempo para detener el balón.
Acusó el golpe Las Palmas, que cedió durante diez minutos de continuas llegadas rojiblancas, entre ellas un testarazo de Etxeita al palo tras córner botado por Susaeta, y otro bombeado de Gurpegui que se fue fuera por poco finalizando una jugada con varios rechaces.
Pasada la media, los visitantes se fueron quitando la presión local de encima y pudieron empatar en un centro al segundo palo de Viera en el que Araujo buscó a Vicente Gómez en vez de rematar directo y Etxeita se interpuso en el pase, ya en el área pequeña.
La segunda mitad empezó también muy movida, aunque sin ocasiones en el primer cuarto de hora. Y en la primera que hubo empató Las Palmas. Fue Vicente Gómez el que batió a Iraizoz con un tiro cruzado tras rechace de la defensa local.
Poco le duró la alegría al equipo amarillo, ya que Williams puso rápidamente el 2-1 con otro tiro cruzado después de robar un balón a Culio al borde del área y que Dani Castellano se resbalase ante él.
Pero no habían dicho todo los de Setién, que equilibraron de nuevo el choque con otro disparo, este desde la frontal de Tana y haciendo botar el balón antes de que entrase entre los tres palos.
De ahí al final, cierto asedio local y buena gestión del balón de los visitantes, que incluso realizaron el último empate de un partido vibrante y más que entretenido para los espectadores.