Costó sudor y sangre el triunfo aurinegro. Y nunca mejor dicho, por aquello de que Mike Tobey tuvo que retirarse incluso mediado el segundo cuarto a vestuarios por un golpe fortuito en la nariz y jugó luego toda la segunda mitad con una fractura del tabique nasal. Fue el mejor botón de muestra del paso al frente que dio un equipo, el tinerfeño, que hoy sacó a relucir su versión más colectiva (26 asistencias) para superar a un señor rival, espoleado por un Santiago Martín volcado con la causa y escenario del tercer lleno en lo que va de temporada.
No fue fácil, entre otras cosas porque el Canarias se topó con un rival muy duro, liderado por un gran Tornike Shengelia. Pese a todo, el conjunto insular afrontó el desafío sin complejos y dio el primer aviso serio a navegantes con una notable puesta en escena. El criterio a la hora de circular el balón (sólo ocho pérdidas en todo el encuentro) y dos triples casi consecutivos de Tim Abromaitis abrieron ya una primera brecha significativa en los primeros minutos (15-7, min. 7).
La inspiración de alapívot estadounidense (13 puntos en 11 minutos) dio consistencia a un Iberostar Tenerife que amenazó con estirar su renta camino del descanso (29-20). Fue entonces cuando irrumpió la buena mano de Matt Janning y el carácter de Shengelia. El Baskonia respondió con un 0-11 de parcial y en media sangría, los anfitriones perdían a Tobey por el citado golpe (29-31). De ahí en adelante, el grupo de Pedro Martínez impuso su calidad para irse tres arriba al receso.
Sin embargo, tras la pausa, el Canarias aumentó más si cabe la intensidad defensiva, fue progresivamente igualando la batalla del rebote y jugó con la determinación de un equipo irreverente, ajeno a las adversidades y con la fe suficiente para llevar el partido a su terreno. Un triple de San Miguel devolvió a los locales la delantera en el electrónico (44-42); mientras que los vitorianos sumaban desde el tiro libre.
Los buenos minutos de Petit Niang y la irrupción de Vasileiadis, un cuchillo desde el perímetro, amenazaron de nuevo con poner tierra de por medio (57-51). Intentó reaccionar el Baskonia (59-57), pero un nuevo arreón de Kostas, con cinco puntos consecutivos, incluido un triple sobre la bocina del tercer cuarto (64-57) terminó de dinamitar un Santiago Martín pletórico. De ahí al final, el conjunto visitante trató de exprimir la calidad de Shengelia, pero lo cierto es que se topó con un adversario tremendamente sólido.
Varias acciones de mérito de Tobey, ya con la nariz rota (71-63) y un triple importante de Rosco Allen (74-67) minaron la moral de los vascos para dar paso luego a un mate de videoteca de Tim Abromaitis seguido de un triple de Vasileiadis (81-70), ante el éxtasis del respetable. A esas alturas, el Iberostar Tenerife estaba ya lanzado y no hizo más que estirar su renta para llevarse una meritoria victoria, la tercera ante un rival de Euroliga en lo que va de campaña.
