Concretamente, los destinatarios de esta convocatoria de ayudas son las empresas autónomas de la demarcación de la Cámara que pertenezcan a alguno de los epígrafes de actividad del CNAE-2009, grupo 47 o que estén dadas en el IAE en los epígrafes 64, 65 o 66, quedando excluidas las farmacias.
Los empresarios que puedan acogerse a Diagnóstico de Innovación Comercial contarán con el apoyo directo de un asesor que desarrollará un profundo análisis sistematizado de aspectos que son fundamentales en la gestión del establecimiento comercial, con el fin de identificar puntos fuertes y débiles en áreas clave del negocio. En base a dicho análisis, el comerciante recibirá un documento con una serie de recomendaciones que permitan la mejora de la innovación y competitividad del comercio.
Según explica la directora general de la Cámara de Comercio, Lola Pérez, "el Diagnostico de Innovación Comercial es una oportunidad para examinar con objetividad el punto de venta, que es el punto de conexión entre el comerciante y cliente, donde, en gran medida, se construyen y expresan las preferencias de los consumidores".
En este sentido, señala que un adecuado diseño del establecimiento, un cierto conocimiento de las técnicas de merchandising, gestión de lineales, escaparatismo, etc. son cada vez más necesarios para el comerciante, donde la relación con los clientes adquiere más relevancia que en otro tipo de negocios, por lo que es necesario un mayor compromiso en todo lo referente con su atención y servicio, el conocimiento de sus necesidades y su fidelización".
De esta manera, apunta que "con el Programa de Diagnósticos de Innovación Comercial lo que pretendemos desde la Cámara es actuar propiciando la modernización del punto de venta, mediante la mejora y la innovación organizativa, la puesta a punto de los elementos que configuran su imagen y la mejora en la atención y el servicio al cliente".