Pero si la destrucción de empleados públicos deteriora la prestación de los servicios esenciales de las Islas, NC puso el acento crítico en la disminución de 40,8 millones de euros en los presupuestos de la Consejería de Sanidad al mismo tiempo que la financiación para el SCS se reduce en 27,7 millones de euros, un 1,1%, en comparación con 2012.
Además recalcó que, a lo largo del actual ejercicio económico, el SCS ha abonado 190 millones de euros no presupuestados para el pago a proveedores, satisfechos con cargo al fondo estatal. Este dato, según NC, deja ver que la reducción real de fondos de esta entidad pública es de 218 millones de euros.
Tampoco las inversiones salen mejor paradas. La partida asignada ronda los 20 millones de euros, una cantidad "ridícula" para la dimensión de este servicio, denunció el líder de NC. En su opinión, esta inversión impedirá el desarrollo de los planes directores de los hospitales de Fuerteventura, Tenerife y Gran Canaria, entre los principales.
El portavoz de NC reveló que "no hay", en el proyecto de ley, partidas que permitan mejorar los programas de intervenciones quirúrgicas, ni de consultas especializadas y menos de pruebas diagnósticas, con lo que las listas de espera "no harán más que empeorar". Rodríguez recordó que, en el primer semestre de este año, las listas quirúrgicas de más de seis meses habían crecido un 130% y que, a finales de junio de 2012, esperaban por una operación 27.184 pacientes, un "30% más que hace un año".
