Emilio Duró, uno de los ponentes más activos del momento, ha trasladado a los asistentes la necesidad de "mantener un alto coeficiente de optimismo" a la hora de enfrentarse a la actual situación económica
"A pesar de que la gran mayoría de los estadounidenses tienen un gran desconocimiento sobre nuestro país, cada vez son más quienes nos visitan y descubren una España moderna y desarrollada desde el punto de vista tecnológico", ha explicado hoy el diplomático español Inocencio Arias durante su intervención en el Foro Hacia un nuevo modelo de gestión Empresarial, celebrado en Melilla.
De esta forma, Arias, que analiza este tema en su libro Me acosté con Suárez y me levanté con Zapatero, ha ilustrado qué visión tiene cada país del otro. "Los Estados Unidos ven a Europa, y concretamente a España, como una sociedad que ha vivido por encima de sus posibilidades". "Tienen un respeto considerable por Alemania; desconfían de Francia desde el punto de vista de la política exterior y, sobre España, poseen un gran desconocimiento mezclado con un sentimiento de simpatía e influenciado por viejos clichés", ha dicho Arias, si bien ha reconocido que esto último va cambiando.
En cuanto a la perspectiva que los españoles tenemos sobre Estados Unidos, Inocencio Arias ha considerado que "sentimos una extraña mezcla de admiración que nos lleva a evitarlos y tenemos hacia ellos una gran desconfianza que roza a veces la animadversión". Sin embargo, "a la misma vez consumimos de forma voraz sus productos y el mejor ejemplo es el cine y las series de televisión, que preferimos a las de cualquier otro país".
Inocencio Arias ha sido uno de los ponentes invitados por la Sociedad Pública de Promoción Económica de Melilla (PROMESA) para analizar las características del mercado laboral y cómo evolucionará la demanda de empleo en los próximos años.
El objetivo del encuentro ha sido proporcionar a los empresarios de la Ciudad la visión que tienen expertos de reconocido prestigio sobre cómo mejorar, desde una perspectiva de futuro, los modelos de gestión de las pymes de Melilla, ya que estas son la base del tejido empresarial, y qué oportunidades laborales se abren con ellos.
En este foro también ha participado el director ejecutivo de Loyola Leadership School, Francisco Pérez Fresquet, que ha reflexionado sobre la demanda de nuevos perfiles profesionales. En este sentido, Pérez Fresquet ha insistido en que los nuevos escenarios de futuro y, por tanto, la demanda de nuevos perfiles profesionales están cambiando a una velocidad mayor de la que a veces podemos ser conscientes.
"Vivimos en la época de la obsolescencia del conocimiento –ha afirmado- por que en el conocimiento influyen los rápidos cambios del modelo productivo y el alto ritmo de evolución de la tecnología", entre otros aspectos.
Por eso, ha explicado que desde Loyola Leadership School se ha analizado cómo será la sociedad del año 2030. "Estará marcada por una población mundial de unos 8.300 millones de personas, con el consiguiente incremento de la demanda de alimentos en más del 50 por ciento, algo que afectará irremediablemente a los comportamientos de los diferentes sistemas productivos y económicos", ha dicho.
Todo eso hará que "empecemos a ver cultivos de tipo vertical, profesionales que desarrollarán su labor en el entorno virtual, policías que sean responsables del control del clima, gente que desarrolle nuevos conceptos y nuevas profesiones", ha explicado Francisco Pérez Fresquet. "Y tenemos que prepararnos para tener una gran capacidad de respuesta", ha añadido tras afirmar que el escenario está cambiando a un ritmo muy rápido que hace que surjan nuevas demandas en los sectores empresariales.
Por su parte, Emilio Duró, considerado uno de los ponentes más mediáticos del momento, y miembro de IterConsultores ha explicado a los asistentes al Foro la importancia de mantener una actitud optimista ante la situación económica actual.
"Vivimos en un mundo en el cual nos sobran los conocimientos técnicos, pero nadie nos ha enseñado a enfrentarnos a la adversidad, a hacer frente al pesimismo generalizado y a cómo superar los retos. Por ello, el principal reto que me he marcado a la hora de impartir esta charla ha sido desarrollar entre los asistentes la necesidad de tener un coeficiente de optimismo ante este momento que nos ha tocado vivir".
Esta iniciativa está cofinanciada en un 75% por la Unión Europea a través del Fondo Social Europeo.