Estas cifras no tienen en cuenta los efectos negativos sobre el desempleo provocados por los despidos en el sector público.
IUC recuerda que "la reducción de la masa salarial reduce el consumo y, por tal motivo, las empresas venden menos, despiden más, contratan menos, pagan menos impuestos, el Estado ingresa menos y, de ese modo, se reducen los recursos públicos siguiendo una pauta que parece casi una fórmula matemática para provocar una gran recesión".
IUC indica que casi el 80% del empleo lo crean las pymes y que la mayor parte de sus clientes son trabajadores. "Por ello, si se reduce la masa salarial se provoca más desempleo y se hace más difícil emplear a quienes ya estaban desempleados. Es importante entender que empleados, desempleados, trabajadores del sector público y del privado, personas con trabajo fijo y temporal, autónomos y pequeños empresarios se benefician si aumenta la masa salarial y son castigados si la masa salarial se reduce, como ha ocurrido a consecuencia de la reforma laboral y del ataque del PP a todo lo público".