Se trata de 130 pequeños, con edades comprendidas entre los 7 y 12 años, que pasarán los meses de verano en Tenerife gracias a la iniciativa y el trabajo incansable de la Asociación Canaria de Amigos del Pueblo Saharaui, ACAPS.
En el Salón Noble del Palacio insular también estaba presente el vicepresidente primero y consejero de Bienestar, Sanidad y Dependencia, Aurelio Abreu, quien destacó la solidaridad de los familias acogentes; al igual que la consejera de Acción Social, Cristina Valido, el representante del Frente Polisario en Tenerife, Hamdi Mansur, y la consejera insular delegada del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria, Margarita Pena, entre otros..
Es esta una iniciativa de la Asociación Canaria de Amigos del Pueblo Saharaui, ACAPS, que lleva a cabo gracias a la hospitalidad y la solidaridad de las familias canarias. Prestan a los niños (desde julio hasta la primera semana de septiembre) su atención y cariño para paliar, en lo posible, las durísimas condiciones de vida que soportan habitualmente, donde, por ejemplo, no tienen acceso a la alimentación necesaria para su crecimiento y carecen de servicios tan básicos como el agua potable y corriente o la electricidad.
Durante su estancia, las familias, además de cariño y atención, procuran a los niños en coordinación con ACAPS revisiones médicas y tratamiento en caso de ser necesario así como alimentación más completa que la que obtienen en Tinduf y que consiste básicamente en la ayuda internacional por lo que la fruta, la verdura y el pescado frescos son lujos inalcanzables.
Los niños que participan se reparten en estas vacaciones por las islas de la provincia de Santa Cruz de Tenerife son, en total, 153.