Ciertamente la Biblia es un libro religioso que desde el principio cuestiona y adoctrina sobre qué es bueno y qué es malo, comenta el teólogo luterano alemán Dieter Potzel: «En líneas generales se podría decir que la Biblia contiene consejos buenos y positivos acerca de cómo la persona puede llevar a cabo su vida. Sin embargo también existen muchos pasajes negativos, incluso de dudosa legalidad, en los que por ejemplo se exhorta a matar. A pesar de contener normas sobre una ética y moral elevadas, también contiene muchas cuestiones conflictivas. Y la verdad es que la Biblia luterana contiene un pasaje titulado "pena de muerte para hijos descarriados", un pasaje apenas conocido por la inmensa mayoría de cristianos, puesto que por suerte ha prevalecido el Mandamiento dado por Moisés que dice "No Matarás"».
En el capítulo 21 del Deuteronomio se puede leer lo siguiente: «Cuando uno tenga un hijo indócil y rebelde, que no obedece la voz de su padre ni la de su madre, y aun castigándole no los obedece, lo cogerán su padre y su madre y lo llevarán a los ancianos de su ciudad, y a la puerta de ella dirán a los ancianos de la ciudad: Este hijo nuestro es indócil y rebelde y no obedece nuestra voz; es un desenfrenado y un borracho; y le lapidarán todos los hombres de la ciudad. Así quitarás el mal de en medio de ti» Y luego continúa diciendo: «Y todo Israel al saberlo temerá».
Con todo esto en la mano se puede afirmar que el padre asesino y versado en la Biblia, actuó basándose plenamente en este pasaje bíblico o en otro parecido, lo que no deja de ser algo tremendamente peligroso. El teólogo Potzel afirmó posteriormente: «Yo personalmente nunca le daría a un niño una Biblia sin pensarlo antes muy bien».
José Vicente Cobo