Primero, el batacazo electoral, que vino producido tras el mal gobierno demostrado a lo largo de la pasada legislatura, donde hubo varias reorganizaciones del equipo municipal, algunas de ellas tan importantes como concejales de Hacienda, que iban y venían y donde faltaba la figura de un Alcalde que dirigiera y coordinara un equipo. De hecho, desde Pensar en voz alta ya esbozaba en febrero de 2011 algunas de las necesidades que tenía nuestra ciudad, la más importante de ellas, Necesidad de cambio.
Más tarde, una vez constituido el equipo de oposición municipal, Chano Franquis pasó a estar al frente de la portavocía del grupo socialista en el AyuntamientoLPA, con la ida de Jerónimo Saavedra, a la vez que más tarde sería elegido diputado nacional. Sus idas y venidas a la capital del país hacían de un grupo socialista cada vez más fraccionado, un grupo débil en el que la voz referente no vivía continuamente en Las Palmas de Gran Canaria y que hacia que la oposición, delegada en la concejal Isabel Mena, quedara desterrada a criticas sin base.
En las últimas semanas a raíz del pleito que ha surgido en la agrupación socialista de Las Palmas de Gran Canaria me he vuelto a plantear si, ya no sólo los votantes socialistas, sino el conjunto de la ciudadanía de la ciudad merece este despropósito de manos del segundo partido político más votado.
Las discusiones entre el bando de Chano Franquis y el bando de Isabel Mena se hacen cada vez más notorias. Ya no esconden sus rencillas y sus peleas, y ocupan portadas y páginas de periódicos casi a diario. La última batalla entre estos dos grupos cada vez más visibles en el PSOE capitalino la ha ganado el bando de la portavoz socialista, Mena ha forzado la dimisión del concejal Aridany Romero, que además de su cargo público ocupa el cargo de secretario de organización de la agrupación socialista capitalina. Todo ello, por cierto, fruto de que este último enviara un comunicado de prensa criticando a la primera por sus actitudes.
Desde el pasado Congreso del PSOE-LPGC para elegir nuevo Secretario General en el que salió elegido Chano Franquis y en el que se mostró una clara división interna, la portavoz en el municipio se mostraba contraria a su antecesor. El malestar y la notoriedad de estas discusiones ha ido in crescendo hasta tal punto que en un nuevo Congreso municipal, en este caso para elegir delegados al Congreso Federal del PSOE que elegiría a Pedro Sánchez como Secretario General del PSOE hubo nuevo pleito interno. Nada más y nada menos que Juan Fernando López Aguilar presentó una lista alternativa a la presentada por el propio Chano Franquis y en la que iba, como no podía ser de otra manera, la portavoz socialista, Isabel Mena.
Estas peleas de poder, llevan a la oposición socialista encabezada por Isabel Mena a tomar actitudes que a veces toman posiciones tan singulares como la que hizo a esta portavoz preguntar el miércoles pasado, en el último pleno municipal antes de las vacaciones, si el Alcalde de la ciudad había cobrado por su caché en la aparición en el anuncio de Guaguas Municipales, o que acusara al PP de la sentencia del derribo de la biblioteca cuando el propio Partido Socialista votó a favor de su construcción en el emplazamiento actual.
Todo esto sucede cuando se pone por encima las peleas por el control del aparato del partido que las ganas de sumar por mejorar la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria.

Eliezer Santana

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