Llegados a este punto se hace necesario abordar de modo crítico y autocrítico dichos factores subjetivos para avanzar hacia una corrección de estos que nos permita estar en situación de canalizar la terrible situación objetiva, determinada por las lamentables condiciones de vida que se están dando, para levantar la alternativa unitaria del pueblo canario y, en general, de los pueblos del Estado. Y es que estoy convencido de que sin esa alternativa unitaria no vamos a poder retomar las contundentes movilizaciones que, esta vez sí, pudieran asestarle al neoliberalismo y sus representantes políticos el golpe definitivo para derrotarlos, incluso en la forma de victoria electoral de un frente amplio político y social.
Potenciemos pues, ahora como condición previa inexcusable, la alternativa política y social del pueblo que tendrá que basarse en la firmeza ideológica y política frente al neoliberalismo y en la coordinación, agrupamiento y unidad de personas, colectivos sociales y organizaciones políticas en torno a un programa básico común, de emergencia, frente al dogma neoliberal. Ya hay iniciativas en marcha, hagámoslas converger urgentemente y no paremos hasta lograr, de modo absolutamente prioritario, la alternativa unitaria en Canarias y en el Estado español. Aunque restemos esfuerzos a la movilización que se seguirá produciendo inevitablemente, pero que seguirá siendo débil hasta que la población no tenga ante sí la perspectiva de cambio, la certidumbre de que hay realmente una alternativa, su alternativa, a los partidos del sistema y sus políticas destructivas.
En este proceso, l@s comunistas que actuamos en distintas organizaciones sociales y políticas, debemos potenciar el referido proceso unitario también como concreción de lo que ha de ser el permanente objetivo de lograr tanto nuestra unidad de acción social y política como la unidad ideológica y orgánica. Estamos inmersos en el desarrollo de las condiciones para la conformación de un amplio bloque social y político que desde la resistencia a las políticas neoliberales puede convertirse en una nueva mayoría política para recuperar y profundizar la democracia en beneficio de la mayoría social.
Nos encontramos pues con lo que podríamos denominar tareas externas a los comunistas y tareas internas de organización comunista. Ambas guardan íntima relación y la priorización de cualquiera de ellas, o su contraposición (frente amplio versus partido comunista) es errónea. Solo en la lucha social y política se desarrolla la organización comunista, debiéndose impedir además que las exigencias de los instrumentos organizativos, expresiones de las alianzas y acuerdos programáticos con otras representaciones sociales y clases, diluyan la convicción de la necesidad de la organización comunista, sustituyéndola por la idea del partido interclasista.
Lenin al referirse a los "bloques de izquierda", planteaba su definición en función de la correlación de fuerzas y del cuadro de las posiciones de clase e insistía en la necesidad irrenunciable de que el partido comunista mantenga en ellos una posición independiente y firme respecto a la "táctica partidista consecuente" en el desarrollo de la unidad de la izquierda.
Esa debe ser la posición comunista ante la necesidad histórica que demanda un bloque político y social, un frente amplio de las fuerzas progresistas que haga posibles las transformaciones que el pueblo canario y los otros pueblos del Estado están reclamando.
Arturo Borges Álamo
Comunista y médico