Los volados de los vertederos, fundamentalmente constituidos por plásticos, representan un importante riesgo ambiental porque favorecen la aparición de ratas y moscas en el entorno atraídos por los restos orgánicos al tiempo que se depositan en el entorno y en muchos casos estas bolsas van a parar al mar efecto de la escorrentía en época de lluvia. También son motivo de queja por parte de los cabreros que aún transitan esos barrancos porque pueden ser comidos por los animales con el consiguiente riesgo, por lo que el efectivo control de estos volados en los vertederos no sólo es un deber de puro sentido común sino que es exigencia de la normativa tanto europea como española y canaria.
Por todo ello desde el Foro contra la Incineración reclamamos al Cabildo las medidas oportunas para que la llegada del verano no suponga una nueva pesadilla para el entorno del vertedero al estilo de aquellos tiempos en los que reinaba el caos más absoluto en la gestión de dicha instalación.
Foro contra la incineración