No siempre tenemos la oportunidad de actuar, de cambiar lo que no nos gusta. No siempre podemos influir en el futuro más próximo. No. No siempre se nos presenta la gran oportunidad, la gran responsabilidad de decidir las claves del mañana.
Estamos, todos y todas, al borde de la fina línea que nos diferenciará de los pasivos, los grises, los que critican porque si. Estamos a un sólo paso de poder materializar nuestro sueño común de una ciudad regida con transparencia, coherencia y sobre todo honestidad.

Una cosa es ser concejal sin más, y otra muy distinta ser concejal de la calle. Esto lo he descubierto gracias a la iniciativa que llamamos "Pleno abierto" y que pusimos en marcha el pasado mes de noviembre. Desde que ocupé por primera vez el sillón de concejal empecé a comprender a la gente que decía que "eso" (se referían al pleno) no servía para nada, que era un paripé.

Todos dicen ahora que son la clave del futuro de Telde. Todos dicen que son transparentes, honestos, capaces y sobre todo, que tienen un plan para la ciudad. Y yo, que como quien dice acabo de llegar a la política, me pregunto por qué esa necesidad de cantar a los cuatro vientos que son transparentes, honestos y capaces, cuando han tenido tiempo de sobra en mandatos anteriores de demostrarlo. El movimiento se demuestra andando, reza el refrán, de ahí que no entienda ni yo, ni muchos de los ciudadanos, el empeño en decir lo que se debería haber demostrado de aquí para atrás.
Eso sin mencionar que tales atributos se le presuponen a quien gestiona lo público. Por qué decir que somos transparentes, demostrémoslo; por qué decir que somos honestos, demostrémoslo; ¿y capaces? Ídem. Los que no tenemos trayectoria política, tenemos que pedir a los ciudadanos que nos den una oportunidad, que nos dejen trabajar a su servicio los próximos cuatro años para que comprueben que efectivamente esas tres cualidades son una realidad en nuestro caso. Pero ¿y los que ya han gobernado? Peor aún, ¿y los que están gobernando ahora mismo? ¿Acaso no tienen ellos la mejor de las oportunidades para demostrar en lugar de proclamar, para hacer en vez de decir?.

Ciudad del Deporte, reparación de colegios, reasfaltado de calles... Telde se pone "guapa" para las próximas elecciones. La maquinaria de siempre se pone en marcha y los que asistimos a ella nos llevamos las manos a la cabeza además de preguntarnos si en cuatro años de mandato todo eso no hacía falta ya, como para hacerlo justo antes de los comicios.
No es serio que un colectivo de padres, ajenos a la vida en los juzgados, tenga que verse en uno de ellos para que el Ayuntamiento, la administración más cercana al ciudadano, se digne a poner un techo firme sobre las cabezas de sus hijos. Y de repente aparece el dinero, que se desvía, que se reasigna, que vete tú a saber. Si ha podido hacerse tras la denuncia, por qué no hacerlo antes, por qué condenar al ciudadano a la impotencia y la desesperación para luego arreglar no ése, sino varios colegios más. No lo entiendo.

La sentencia del denominado "Caso Europa", pieza separada del principal CASO FAYCAN, evidencia la peor etapa del municipio y las formas de muchos de utilizar la política para hacer negocio, pero "ni son todos los que están, ni están todos los que son". Los principales muñidores de esta trama no han sido tan siquiera juzgados. Como mucho reprobados. Es imposible creer que medio departamento de Urbanismo esté condenado con su ex jefe a la cabeza, y el máximo responsable político de aquellos oscuros años, se vaya de rositas, sin tan siquiera dimitir como cargo público.

He de confesar mi sorpresa e indignación ante diversos hechos que se vienen sucediendo en nuestro municipio, como consecuencia de las actitudes y modos con que proceden diversos miembros del Grupo de Gobierno, a los que al parecer no les basta con aplicar un Plan de Ajuste durísimo, con unas subidas impositivas abusivas, sobre las ya empobrecidas economías de los ciudadanos/as teldenses, todo ello, con la excusa de pagar una deuda "heredada" y de la que en ningún caso puede convertirnos en reos de la misma, a la ciudadanía.

Hoy que soy Secretario General de la Agrupación Juan Negrín de Telde (PSOE), haciendo realidad un sueño, quiero agradecerle a todas las personas que de una u otra manera, me han brindado su apoyo tanto en la Asamblea Local del pasado viernes donde fui proclamado, como a lo largo del camino recorrido para llegar aquí. Como es natural, mi familia y amigos ocupan un lugar destacado, porque son los que más me han tenido que "aguantar" en este duro proceso.

El pasado martes 14 de agosto, se logró materializar con éxito la firma del nuevo acuerdo laboral entre las trabajadoras de las Escuelas Infantiles y el Ayuntamiento de Santa Lucía que garantiza la continuidad de las mismas, dando estabilidad laboral a las trabajadoras y sus familias.
Desde el año 2011, la Comunidad Autónoma de Canarias retiró la subvención que venía abonando a la Fundación Escuelas Infantiles de Santa Lucía S.A. para el mantenimiento de las Escuelas Infantiles del municipio. La coyuntura nueva abocó a estos centros a una situación económica muy complicada pero no insalvable, como se ha demostrado con el acuerdo.
Hasta esa fecha, las Escuelas Infantiles de ese municipio, a groso modo se sostenían económicamente por 1/3 del presupuesto que lo aportaba el Ayuntamiento, 1/3 el Gobierno de Canarias y 1/3 los padres. La retirada del dinero del Gobierno de Canarias supuso que había que cubrir un tercio del presupuesto. Pero lo importante de éste acuerdo radicaba en que las partes negociadoras apostaban por un servicio público y de calidad, cuando lo fácil hubiese sido privatizar y externalizar siguiendo la "moda" que se ha practicado en Gran Canaria en esta materia.
Un tema tan importante como son los niños y su educación, unido a la defensa del empleo (más aún cuando en el contexto económico actual lo público está siendo denostado), ha hecho posible un acuerdo con la apuesta por este proyecto educativo y el sostenimiento de las Escuelas Infantiles de Santa Lucía como servicio público. El Ayuntamiento de Santa Lucía aumentará su aportación económica anual, los padres incrementarán sus cuotas y los trabajadores sacrificarán una parte importante de sus retribuciones, suspendiendo derechos que se contemplan en el convenio colectivo.
El presente acuerdo además venía con una complejidad añadida en términos jurídicos: Adaptar las condiciones de trabajo a las imposiciones que afectan del Real Decreto-ley 20/2012, de 13 de julio, de medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad, que se ha hecho muy famoso por quitar una paga extraordinaria en diciembre a los funcionarios o su valor porcentual baremado sobre un 7% pero que engloba medidas muy duras al personal laboral de empresas públicas. Este Real Decreto-ley, da la posibilidad de anular o suspender convenios colectivos, modificar complementos en las bajas médicas, reducir permisos y anular cualquier acuerdo que contradiga el acuerdo o exista peligro de déficit.
El acuerdo ha supuesto un éxito, demostrando que los servicios públicos tienen sentido, más aún cuando vienen acompañados del mantenimiento del empleo. En éste sentido, cabe destacar que por período de un año, se suspende el convenio colectivo, se garantizan los puestos de trabajo y que las trabajadoras, una vez han perdido una paga extraordinaria por culpa del "Decretazo de Rajoy", han cedido la paga extraordinaria de verano, el plus de destino y una reducción del 4% para equilibrar la parte que falta del Gobierno de Canarias.

Para mí ha sido un orgullo participar como asesor en la dura negociación del presente acuerdo junto a Juan Miguel Suárez Santana de CCOO. Desde aquí quiero darle las gracias a todo el comité de empresa: Dña. Teresa Arbelo Artiles en calidad de presidenta del comité de empresa (UGT), Dña. Josefa Verde Benítez (UGT), Dña Dolores Galván Vera (UGT),Dña Lourdes Delgado Ortega (CCOO),Dña. Soraya Vera Bueno (CCOO) y a todas las trabajadoras de la Escuelas Infantiles por su apoyo sincero y constante.

Además de darle las gracias a Gustavo Santana y David Mosquera en calidad de Secretario General de UGT-Canarias y UGT-Gran Canaria respectivamente por su designación para que dirigiese la parte jurídica del presente acuerdo que ha cambiado la inercia de la privatización y externalización de las Escuelas Infantiles de Gran Canaria, así como a la concejala de educación y al grupo de Gobierno de Santa Lucía de Tirajana.

Alejandro Ramos Guerra, responsable de la UGT y militante del PSOE en Telde.