Ya una vez les pedí su ayuda para hacer realidad ese sueño de una ciudad justa y para todos y todas. Hoy no les pido ayuda, porque desde ese día, cuando presenté mi candidatura, hasta hoy me han demostrado que somos muchos los que este domingo daremos ese paso al frente para gobernar Telde desde el diálogo y la igualdad entre vecinos.
Bastará con hacer justamente lo contrario que ha hecho el gobierno saliente. Bastará con aplicar nuestro sentido común de socialistas, nuestra honradez de ciudadanos para construir una ciudad sostenible, con un sistema que recaude impuestos si asfixiarnos, con deporte y cultura accesible para todos, ayudas a empresarios y emprendedores, con servicios públicos recuperados y un larguísimo etcétera que el gobierno de PP, CC y Ciuca ha tardado cuatro años en destruir.
Bastará con construir políticas en torno al diálogo con todos los colectivos, con más atención a los vecinos y vecinas que más lo necesiten, a cuidar de nuestros mayores y enfermos, fomentar el desarrollo de nuestros jóvenes. ..hacer en definitiva una ciudad de la que podamos volver a sentirnos orgullosos.
Y para todo esto es necesario un pequeño gesto, aprovechar esa gran oportunidad que se nos presenta el próximo domingo. Hay que votar y hacerlo por el sueño común de recuperar el orgullo de ser teldense, de ser obrero, de ser ciudadano y sobre todo, el orgullo de formar parte de algo grande, parte del futuro.
Nos han hecho creer que esta ciudad no nos pertenece, que es algo que sólo manejan unos pocos y que no tenemos ni siquiera derecho al pataleo. "Cerraremos las escuelas infantiles" y dio igual la uva, la protesta, la oferta de diálogo. Las escuelas se cerraron dejando en la calle a las profesionales y sin opciones de conciliación laboral y familiar a cientos de familias. "Cerraremos los aparcamientos públicos y gratuitos" y lo hicieron. Gestel, Parques y jardines, bibliotecas, privatización del deporte, radio municipal, escuela de música, trabajadores de limpieza y un larguísimo etcétera que se impuso de espaldas al los ciudadanos, en contra de su voluntad y haciendo oídos sordos a sus necesidades y opiniones.
Tenemos la oportunidad de que eso no vuelva a pasar. Tenemos la oportunidad de cambiar todo eso y volver a una ciudad solidaria y de bienestar. Tenemos una gran oportunidad. ¡Aprovechémosla!

ALEJANDRO RAMOS