Cuando se inició el trámite parlamentario de revisión de la Ley de Costas, los concejales de Sí se puede entendimos que era el momento idóneo para exigir el reconocimiento de la especificidad de estos enclaves rurales y presentamos una moción reclamando a los diputados y senadores canarios que introdujeran enmiendas durante el debate en las dos cámaras.
La moción fue aprobada por unanimidad y al poco tiempo el Alcalde convocó a los diputados y senadores canarios, que adquirieron el compromiso de defender a los vecinos de Anaga. Pasado el tiempo y tras los filtros de las dos cámaras, hemos comprobado que texto aprobado con esta nueva reforma legal no establece cambios significativos para Tachero, Roque de Las Bodegas, Almáciga, Benijos e Igueste de San Andrés y por tanto no atiende el compromiso que adquirieron los diputados y senadores canarios de plasmar en el nuevo texto las singularidades de los núcleos rurales costeros. Pero la sorpresa ha sido que no sólo no reconoce la peculiaridad de los asentamientos rurales sino que en gran medida la empeora la situación anterior al prohibir nuevo uso residencial en los núcleos que se delimiten.
Desde nuestro punto de vista este fracaso de los representantes públicos en Madrid requiere una explicación a los vecinos de Anaga, sobre todo de los diputados y senadores canarios del partido popular.
Pedro Fernández Arcila. Concejal de Sí se puede en Santa Cruz de La Laguna