Las elecciones hasta 2015 fueron en condiciones mínimas, dieron paso a la destrucción del país, pero luego de la aplastante derrota sufrida ese año en las elecciones parlamentarias, el chavismo realizó una reingeniería tan ilegal e ilegítima que es quien impone a placer las circunscripciones, las directivas de los partidos (incluyendo los de la "oposición"), partidos, candidatos, electores y resultados, allí el origen de las sanciones que recaen sobre el régimen chavista y algunos de sus cabecillas, sin embargo, han sabido como burlarlas apoyados en otras tiranías.
La invasión genocida de Rusia a Ucrania ha hecho estallar una crisis energética de la que el castrismo venezolano está obteniendo grandes beneficios tales como flexibilización de las sanciones y el muy factible reconocimiento a una elección trágicamente ilegal e ilegítima.
Sí esto ocurre, los venezolanos estarán siendo sacrificados, el régimen chavista en control discrecional de las inagotables riquezas de Venezuela, de sus instituciones y sus armas, se enclaustrarían mucho más en el poder, plagando a los habitantes de ese desnaturalizado país de más controles, racionamientos, opresiones y las depravaciones de una élite política insaciable en corrupción y todo tipo de malos hábitos.
Una decisión como esa no solo afectaría a Venezuela, sino al mundo entero, ya lo estamos padeciendo. El resucitar de la izquierda retencionista del poder en Latinoamérica no es gratis ni fortuito, tiene su epicentro en los gobiernos de Cuba-Venezuela, el primero impone estrategias, el segundo las financia. Así pues, como todo acto pagano, el sacrificar a los venezolanos por petróleo y gas puede traer peores consecuencias que una escasez de energía. @leandrotango
Lic. Leandro Rodríguez Linárez
Politólogo